VENETIAN FLOORS

Venetian Floors

Scuola Grande San Giovanni Evangelista

Los turistas en Venecia pasean con la mirada en alto, embelesados por los espléndidos edificios. Pero se pierden la mitad del espectáculo. Si miraran hacia abajo, verían una alfombra de piedras, mármol, mosaicos y vidrio. Venecia tiene los suelos más fastuosos del mundo. ¿Por qué? “En una ciudad construida sobre el agua” – observó el escritor de viajes John Julius Norwich – “los brillantes reflejos de Iglesias y palacios atraían la mirada [de los Venecianos] continuamente hacia abajo”. Así que hicieron esa visión aún más gozosa por medio de unos lujosos pavimentos. El empedrado es un asunto serio en Venecia: la piedra protege de la humedad de la laguna y aleja el calor en verano. El fotógrafo alemán Sebastian Erras ha paseado por Venecia para capturar sus pavimentos más bonitos. “Tenía curiosidad por descubrir otra cara de Venecia, que probablemente no es tan conocida, porque normalmente no prestamos atención al suelo”, afirma. Erras es famoso por un proyecto similar que llevó a cabo en París. Parisian floors es una colección única de imágenes de pavimentos de la capital francesa, fotografiados al estilo “selfeet”, con los pies del fotógrafo incluidos en la imagen.

Sigue a Sebastian en su paseo por Venecia.

1. PALACIOS

Arte fastuoso

Mientras caminaba a lo largo del Gran Canal, me topé con los más refinados palacios venecianos. En los palacios Ca’ Sagredo y Gritti, ambos hoteles de lujo, descubrí el famoso “terrazzo alla veneziana”, o mosaico veneciano. Este pavimento está hecho lanzando fragmentos de piedras de colores sobre una base de mortero. Los artesanos, llamados “terrazzieri”, no siguen un patrón: sus manos expertas mezclan formas y colores de manera que el resultado es asombroso. Me recuerdan a Jackson Pollock, goteando pintura en el lienzo. En el suelo del palacio Pisani Moretta, hallé una margarita encerrada entre lapislázuli, piedra negra “bardiglio”, mármol rojo de Francia, y mármol blanco recuperado de antiguas columnas. Los mercaderes de la Serenissima debieron traer materiales de todo el mundo para construir esa maravilla. Los artesanos que la hicieron, Domenico y Giacomo Crovato, son los antepasados de una familia de “terrazzieri” que aún trabaja hoy en día.

2. MUSEOS

Esplendor conmovedor

El palacio Ca’ d’Oro, hoy un museo, fue apodado “casa de oro” por su aspecto opulento, desde cuando fue construido en el siglo quince. Un barón llamado Giorgio Franchetti realizó el suelo multicolor de su pórtico con sus propias manos, en 1896. Amaba tanto ese pavimento que hizo enterrar sus cenizas debajo de una piedra de pórfido empotrada en él. En otro museo, el Palacio Grimani, me encontré con Michela Scibilia, una diseñadora veneciana y autora de guías turísticas. Michela adora los frescos del museo. “Te sientes como dentro de las páginas de un herbario: pequeños animales aparecen por todas partes en medio de plantas y frutos exóticos entrelazados”, dijo.

Venetian Floors

Scuola Grande San Giovanni Evangelista

3. ESCUELAS

Hermandades de la belleza

Me emocionó encontrar a Franco Posocco, el “gran custodio” de la Escuela Grande de San Rocco, que me enseñó los magníficos suelos del edificio. Es el último de una serie de gran custodios que se remonta hasta el siglo quince. Las Escuelas Grandes eran hermandades de ricos patricios dedicadas al culto de un santo. Podían construir espléndidos palacios e incluso prestar dinero al gobierno en tiempos de guerra, gracias a las donaciones de sus miembros. Por esta razón, la Escuela Grande de San Juan Evangelista se pudo permitir comprar los cuadros del maestro renacentista Tintoretto que aún hoy cuelgan de sus muros. En la entrada de su sala capitular, la imagen de un águila – símbolo de San Juan – me saludó no desde el cielo, sino desde el suelo.

Venetian Floors

Ca’ Sagredo Hotel

4. TIENDAS

Tradición viva

En una tienda en la Plaza de San Marco, una miríada de teselas de vidrio rojo diseminadas por un suelo de mortero brillaban delante de mis ojos. Me pregunté qué aspecto tendrían debajo de un estrato de agua, durante las frecuentes inundaciones de “acqua alta”. Esta tienda fue construida en 1950 por el arquitecto Carlo Scarpa, para la gloriosa marca Olivetti. El pavimento fue realizado por Antonio Crovato, un descendiente de la familia que, siglos antes, había trabajado en el palacio Pisani Moretta. Durante mi visita, descubrí otra dinastía artística: la famila Orsoni, fabricantes de teselas de mosaico desde hace más de un siglo. Tienen un maravilloso laboratorio en Venecia, con piezas color de oro, madreperla y azul alineadas en el suelo: una demostración del potencial de su arte.

Venetian Floors

Negozio Olivetti in Piazza San Marco – bene gestito dal FAI

5. “CALLI”

Brisa veneciana

Pasé un buen rato paseando por las “calli” (calles) con una pareja de adictos a Venecia. La fotógrafa Cristina Cappellari me indicó unos pequeños mosaicos en el suelo, que anuncian restaurantes o tiendas. “No son comparables con los pavimentos de mármol de los palacios, pero son todo un universo, con sus teselas diminutas, sus colores chillones y sus variados estilos tipográficos”, apuntó. El profesor de literatura y escritor Fabio Girardello atrajo mi atención hacia unas huellas hechas de piedra Istriana en el Puente de los Puños. “El nombre viene de un tipo de boxeo en el cual se intentaba tirar a golpes al adversario dentro del agua. Se jugaba entre equipos de distintos barrios de la ciudad”, me explicó. “Cada jugador tenía que iniciar la lucha con un pie dentro de una de las huellas”.

Venetian Floors

Scuola Grande di San Rocco

6. TEATRO

El auditorio imperecedero

Los antiguos romanos decían “nomen omen”: un nombre contiene un destino. Esto se aplica sin duda al teatro La Fenice, el principal teatro de la ópera de Venecia. Su nombre se refiere al ave fénix, un animal de la mitología representado en uno de sus pavimentos. El ave fénix era capaz de resurgir de sus propias cenizas. Y esto es exactamente lo que le ocurrió a La Fenice tras dos incendios que la destruyeron completamente, en 1836 y 1996. Reabrió en 2004 después de una larga restauración basada en el lema “com’era, dov’era” (tal como era y allí donde estaba). Me sorprendí al encontrar pavimentación de madera: los arquitectos venecianos han preferido siempre la piedra por su impermeabilidad. Sin embargo, la madera juega un papel especial en La Fenice, en el auditorio, la madera se escogió y trató para obtener el mejor efecto acústico, una elección respetada por los restauradores.

Venetian Floors

Scuola Grande di San Rocco

7. CAFÉS

Café, cultura y amor

En cuanto puse los pies en el Café Florian, sentí los espíritus de los artistas y pensadores que lo frecuentaron en el pasado: el filósofo Jean Jacques Rousseau, el escultor Antonio Canova, el escritor Marcel Proust, la actriz Eleonora Duse… Muchos de ellos debieron caminar en el mosaico de vidrio de su suelo, con una cinta dorada alrededor de un león, símbolo de San Marco y de Venecia. Los cafés eran auténticos centros culturales en Venecia. En el siglo dieciocho había 26 solo en la plaza San Marco. Silvia Zanella, responsable de comunicación del café Florian, dijo que era uno de los lugares preferidos del seductor Giacomo Casanova. “Se dice que era un asiduo del Café Florian porque era el único sitio que permitía el ingreso a las mujeres en esos tiempos”, comentó.

8. BIBLIOTECAS

La elegancia del conocimiento

Visité algunas bibliotecas para encontrar un poco de tranquilidad en el bullicio de Venecia. En el suelo de la biblioteca Marciana, encontré la imagen de una gran brújula. Esta joya fue instalada aquí a toda prisa, tras sacarla de otro edificio en 1815, en homenaje al emperador Franz I de Austria, que iba a alojarse en el edificio de la biblioteca. En ese momento, la república de Venecia ya había sucumbido al imperio austríaco. Encontré también un pavimento bellísimo en la biblioteca Querini, reformada en 1961-63 por Carlo Scarpa, arquitecto de la tienda de Olivetti que visité antes. Rediseñó la entrada para permitir que entrara la luz, y creó un delicioso suelo hecho con pequeños cuadrados de mármol de Verona (rosa y color ciruela), Carrara (blanco) y de los Alpes (verde).

Venetian Floors

Scuola Grande di San Rocco

9. LA INSPIRACIÓN DE SEBASTIAN

Un remolino de imágenes

No pude evitar quedarme hechizado por las elegantes góndolas que se deslizaban debajo de los puentes. Saverio Pastor, un artesano implicado en su fabricación, me dijo que se necesitan más de diez oficios para construir una góndola: el casco, el remo, la tapicería, las decoraciones de madera, metal y oro… cada una de estas cosas está hecha por un artesano especializado. El mismo Pastor ha salvado del olvido las tradicionales “forcole”: piezas de madera en las cuales el remo hace perno, hechas a mano y a medida para cada “gondoliere”. Mi paseo con la mirada hacia abajo por Venecia me dejó muchas otras imágenes, además de sus fastuosos suelos. Las palomas corriendo sobre los “masegni” (bloques de pizarra gris), las “baute” (máscaras tradicionales usadas para misiones secretas) distribuidas por un vendedor en el suelo, las algas en los márgenes de los canales… Un remolino de imágenes que no habría notado nunca si hubiera tenido la mirada en alto.

Descarga aquí el pdf del paseo de Sebastian por Venecia.

La mirada al frente
La vista en alto

Artículos  realizado por Pixartprinting y publicado originalmente en inglés en: https://www.pixartprinting.co.uk/venetian-floors/