ASUS, máximo poder, máxima seguridad
Tras las explosiones aleatorias ocurridas durante los últimos años, ha disminuido considerablemente la confianza en la seguridad que ofrecen las baterías de smartphone. En consecuencia, las aerolíneas han instaurado severas restricciones para su transporte y ha aumentado notablemente la preocupación de los consumidores. A pesar de la inquietud pública, el incremento del consumo de contenidos a través de los teléfonos hace que la capacidad de las baterías vaya a seguir creciendo durante los próximos años, ya que la autonomía es uno de los factores más deseados por la gran mayoría del público.
La razón por la que las baterías de iones de litio pueden llegar a explotar es la gran saturación de energía que contienen. Si el circuito está mal aislado y ocurre un cortocircuito, el dispositivo se calienta excesivamente durante la carga o se sobrecarga la batería, puede suceder una reacción en cadena denominada “aluvión térmico”, con el efecto potencial de llegar a explotar. Lo cierto es que las baterías de smartphone pueden llegar a ser peligrosas, especialmente aquellas de más alta capacidad.
Pero a pesar de esto, prevenir accidentes es relativamente sencillo, tal y como prueban los fabricantes de smartphones año tras año. En particular, la serie ASUS ZenFone Max ha dado una respuesta ejemplar a la creciente demanda de autonomía de batería. Actualmente en su cuarta generación, la serie ASUS ZenFone Max se presentó en 2015 con el fin de ofrecer smartphones con la máxima autonomía posible y, con más de 6 millones de unidades vendidas en todo el mundo, se ha posicionado como la serie de smartphones con batería de alta capacidad más vendida.
Aunque a lo largo de estos años al serie ZenFone Max se ha actualizado con los últimos procesadores, cámaras y materiales, el rasgo distintivo del ZenFone 4 Max continúa siendo su batería de alta capacidad. El último modelo está equipado con una batería de 5000 mAh que lo dota de un impresionante tiempo en espera de 46 días, hasta 40 horas de habla y además ofrece un modo Power Bank que permite cargar dispositivos externos. Su batería se encuentra alojada en un fino chasis metálico fabricado de una sola pieza, y también cuenta con la característico sistema de cámara doble de la serie ZenFone 4.
A pesar del gran número de unidades vendidas, los smartphones ZenFone Max no han sufrido ningún tipo de incidente, demostrando que las baterías de alta capacidad no tienen porqué ser peligrosas.
Lejos de ser una mera casualidad, las baterías de los ASUS ZenFone Max se someten a 12 comprobaciones de seguridad y certificaciones que superan ampliamente los estándares de la industria. Estas incluyen la monitorización constante de temperatura, el bloqueo automático en caso de sobrecarga o temperatura excesiva y la conformidad con el exigente estándar de carga de batería y administración de tensión de la asociación JEITA.
El ASUS ZenFone 4 Max también incluye una aplicación de administración de batería denominada PowerMaster con un modo “2X Lifespan” que limita automáticamente la carga máxima de la batería al 85 o 95 %. De esta forma se evita el desgaste prematuro de la misma y se multiplica su vida útil por dos respecto a las baterías tradicionales, al margen de evitar cualquier problema derivado de una posible sobrecarga. Y como tiene tanta capacidad de carga, a pesar de limitar su carga por software el dispositivo sigue ofreciendo una autonomía asombrosa.
La tendencia del mercado y el uso intensivo que damos a los smartphones hace inevitable que la capacidad de los smartphones continúe aumentando, pero mientras se recupera la confianza, la serie ASUS ZenFone Max es la prueba de que las baterías de alta capacidad se pueden implementar de forma segura.
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